Febo es un apodo del dios Apolo en la mitología clásica. Probablemente significaba originalmente «brillante».
Los poetas clásicos latinos también aplicaban el apodo Febo al dios sol, de ahí las referencias comunes en la poesía europea posterior a Febo y su carro como una metáfora del sol.
Esta carta nos habla de la masculinidad, de la fuerza, de todo lo apolíneo como el orden, la luz, las leyes, el día, la acción y la limpieza por mencionar algunos.