Estrella Fugaz, Flor de un Día

La luz se gesta en tus entrañas
de mar, cuando la engulle su misterio;
no cesa el brillo, irradia otro hemisferio,
regresa y se convierte en las mañanas.

Así se adhiere el fuego a la madera,
toda fogata el tiempo la consume,
y no hay oscuridad que tanto abrume
si la iluminación llega en la espera.

La vida nos regala la entropía
-que, aunque de comprender no sea capaz-
los duelos también cumplen su vigencia.

Gracias a Dios por conocer su esencia;
en el jardín serás mi flor de un día
y por las noches mi estrella fugaz.


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