Esta semana inicia con el solsticio de invierno y con la conjunción de júpiter y Saturno el mismo día (21 de diciembre), además, a mitad de ella, la navidad. Sin duda, es una semana señalada por los estudiosos de los astros y los sabios de nuestras culturas ancestrales. Es decir, son cierres y aperturas de ciclo, pautas para hacer un alto en el camino y hacer nuestro “corte de caja” y saber hacia dónde nos dirigimos (por nuestros actos y actitudes), para hacer ajustes interiores conscientes y renovarnos.
En estos días, es natural vivir estados emotivos fuertes, desequilibrio en nuestras emociones y poca claridad en nuestros sentimientos, que pueden confundirnos y hacernos sentir en la oscuridad.
El hexagrama de esta semana es el número 29 “Lo Abismal”, compuesto por el mismo elemento: Agua. En términos del I Ching se dice “agua sobre agua”, el ying y el yang cargados por esta energía, interactuando. Sabemos bien que este elemento representa las emociones.
El desequilibrio es necesario para realizar ajustes interiores. En esta ocasión el consejo del sabio es vivir el “desequilibrio controlado”. Tratar de comprender profundamente este revoloteo interior, para que nos ayude a catapultarnos hacia el estado de paz y armonía, pero no solo como cuando se sobrevive y pasa la tormenta, sino, aprovechar los movimientos fuertes de esta energía, como corrientes de la marea que, al elegirlas conscientemente, nos hará llegar a buen puerto y trascender aquello que nos señala nuestro interior.
Desequilibrio controlado y dirigir nuestra energía a cerrar y abrir ciclos.
Resultado:
Hexagrama 29 “Lo Abismal”