El Estado necolonial de ideología criolla, está en una de sus crisis más graves desde que se creó el país de los criollos y gachupines, cuando decidieron hacer las paces, después de haber iniciado las hostilidades en 1810. Crearon su país, de ellos y para ellos, traicionado a los indígenas y mestizos que les sirvieron, en ambos bandos, como carne de cañón. De 1824 a nuestros días, han perdido mucho más de la mitad del territorio heredado de la Colonia. Han entregado al país en pedacitos, en medio de una permanente lucha fratricida por el poder para enriquecerse, entre conservadores y liberales, panistas y priistas, prianistas y morenistas. Han desgobernado este país de la forma más torpe, inepta y, sobre todo, traidora. Los criollos, no solo han entregado su país, sino permanentemente lo han estado saboteando. Los criollos son los peligrosos enemigos de México. Dan dos pasos para adelante y uno para atrás.
Adelantan, pero retroceden. Siempre a las órdenes del poder extranjero, sean gobiernos, bancos o empresas. Construyen, con el esfuerzo y esperanza del pueblo: un sistema de ferrocarril, un IMSS, ISSSTE, CFE, autopistas, aeropuertos, puertos, línea aérea nacional, TELMEX, industrias básicas para promover el desarrollo del país y un larguísimo etcétera. Y ellos mismos, los destruyen, los regalan, los sabotean, obedeciendo ordenes y satisfaciendo intereses extranjeros, gubernamentales o privados. El desmantelamiento, sabotaje, robo y entrega de PEMEX y el petróleo, ha sido su penúltima entrega (hasta ahora), la privatización del agua, pareciera ser la última.
La ideología criolla es la que ha dirigido a la clase política y económica de México, desde 1824, con sus grandes excepciones. Cuando se estudia y analiza la historia de esta nación, el país de los criollos, desde un pensamiento crítico, se llena uno de vergüenza y coraje, de tantas infamias, simulaciones, injusticias y traiciones a la Nación. México ha podido sobrevivir a esta barbarie y traición, gracias a tres cosas. Su pueblo, heredero de una de las seis civilizaciones Madre del planeta, su enraizada cultura milenaria, y su gran riqueza, que pareciera no acabarse. La corona española extrajo 194 toneladas de oro durante los trescientos años del Virreinato. En los últimos diez años, las mineras canadienses y gringas, han extraído cuatro veces esa cantidad.
La ideología criolla se sustenta en el absoluto desprecio al pueblo, la irresponsabilidad histórica sobre la nación, la injusticia, la simulación y especialmente la corrupción. La ideología criolla NUNCA HA TOMADO, a este territorio, su pueblo, su historia y su cultura, COMO PROPIA. Este es el verdadero punto. No existe un verdadero compromiso con nadie ni con nada, solo con sus intereses personales y de grupo de poder, por hacerse de riqueza mal habida.
Sin embargo, el país, a pesar de todo esto, tiene futuro. El problema es que, desde 1521, el poder, siempre ha estado en manos de extranjeros y avecindados. Las 300 familias más ricas son una casta divina, que la mayoría, tiene doble pasaporte. Han faltado personas que sientan un profundo compromiso, pasión y voluntad con el pueblo, su cultura, su pasado. Personas que sientan amor, empatía y responsabilidad con los morenitos y los originarios. Tanto urbanos como campesinos. Personas que amen esta tierra ancestral, sus montañas, valles y costas, que conozcan su milenaria historia, sus valores y principios. Que estén orgullosos de los grandes logros civilizatorios. Personas que entiendan los más profundos y enraizados anhelos de este noble pueblo, que históricamente ha cultivado la búsqueda de su desarrollo espiritual. Nos han faltado verdaderos líderes como Cuauhtémoc, Morelos, Zapata y Tata Cárdenas.
En 1949 se fundó La República Popular de China. En ese momento era una de las naciones más pobres, corruptas y desgraciadas. Desde 1850 había estado sumida en guerras fratricidas e invasiones de las potencias extranjeras. En 1971 China es aceptada en la ONU. 1992, China inicia su modernización. En 1997 Inglaterra le devuelve Hong Kong. En 1999 Portugal le devuelve Macao. En 2008 se realizan los Juegos Olímpicos de Pekín. Según el Banco Mundial, entre el año 2020 y el año 2030 China bien podría ser la primera potencia económica del planeta superando a los E.U.
México tiene todo para dignificar su futuro y ser una gran nación. Es poseedor de una de las seis Culturas Madre del planeta. Tiene más de 120 millones de habitantes. Posee casi 2 millones de km2 de territorio. Cuenta con más de 11 mil km de litoral. A pesar de la depredación, posee biodiversidad y recursos naturales. Pero, sobre todo, posee una sabiduría milenaria que esta viva en sus valores y principios más esenciales en el pueblo. Lo que se necesita es la guía de líderes verdaderos propios-nuestros. El despertar de la conciencia del pueblo, para darse cuenta de nuestro potencial. Siempre hemos sido una gran nación, solo necesitamos utilizar el pensamiento, sabiduría y la filosofía ancestral, para volver a la realidad y salir del laberinto. Lo difícil no es hacerlo, sino imaginarlo. Descolonizar es dignificar.